Un enviado especial de la redacción de OMCat Digest se ha desplazado
hoy al escenario de la próxima prueba de la OMCat para poder captar en
primera persona el estado del campo, a menos de una semana del evento.
La primera sorpresa de nuestro enviado ha sido encontrarse en el campo
a dos de los participanetes de la OMCat. Nuestro periodista ha podido
acompañar en su ronda de prácticas a una de las eternas promesas del
circuito, y a una de las sensaciones de la prueba de golf d'Aro que
terminó solo por detrás del ciclón calimocho. No son otros que Jarvis y
Pituca, que hoy se encontraban en una ronda de prácticas en el campo de
Reus.
Si bien Pituca no podrá asistir a la prueba debido a compromisos
publicitarios, la jugadora barcelonesa ha estado dando apoyo moral en
esta toma de contacto a Jarvis, que se encuentra hundido en el fondo de
la clasificación, y necesita cosechar algún resultado esperanzador que
levante la moral de sus seguidores – y la suya - , que cada vez son
menos.
Durante el recorrido hemos podido comprobar el estado de la cancha,
que era el principal motivo de la visita. A modo de titular podríamos
decir que el campo esta asilvestrado. Posiblemente el campo ha sufrido
un proceso de pinchado recientemente, y aun no muestra su mejor
versión, aunque no sabemos si hay previstas operaciones de
mantenimiento y puesta a punto antes de la prestigiosa prueba del
domingo, que ya se empieza a conocer oficiosamente como Jordiasb Spring
Classic.
En general todo el cesped estaba alto e irregular. Las calles
parecían más un rough cortito que una calle propiamente dicha. Así
mismo, el rough era poco uniforme, y temible en algunas zonas, con lo
que requerirá precisión desde el tee y un poco de suerte con el lie.
Los greens estaban bastante lentos, y esponjosos, con lo que exigían
putts tensos a tablero. A pesar de todo, el estado general era muy
correcto, y todo se podría mejorar drásticamente con el paso del
cortacesped. Veremos que decide el comité para domingo.
Lo que si que ha satisfecho sin dudas a nuestro redactor ha sido el
trato recibido en el restaurante, así como el ágape ingerido. El éxito
de la comida post-partido está garantizado.
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